Fotografias: Elton Rocha y Nuel Puig.
Proyecto de Interiorismo.

casa coctel de color

Blanco, turquesa y buganvilla; un poco de hielo y bien agitado. Esa es la receta que define esta vivienda en Altea, un lugar donde el mar y la luz inspiran cada rincón. Al llegar, lo que más me interesa es que el espacio respire, que no haya límites rígidos sino una continuidad que permita al hogar ser vivido con libertad, alegría y ese toque elegante que siempre busco. El blanco puro funciona como ese lienzo en blanco sobre el que toda la casa se despliega, como un respiro luminoso que da paso a pinceladas de color que emocionan y sorprenden sin estridencias. La frescura es la protagonista, pero con una calidez que invita a quedarse.

En el suelo, un pavimento continuo de Pergo aporta una textura cálida y una sensación de confort bajo los pies, como si la casa respirara con cada paso. El zócalo de Orac Decor, con su presencia sutil pero definida, se convierte en el marco perfecto para esa escena doméstica que estamos creando: elegante y contemporánea, sin perder la raíz ni caer en lo frío.

El salón es un espacio para habitar con los sentidos abiertos. El papel pintado Arty de Pierre Frey, con la energía pictórica de Marie-Cécile Aptel, es la pieza que da alma a esta estancia. No es solo un revestimiento, es una invitación a mirar más allá, a dejarse envolver por una narrativa visual que vibra con la luz mediterránea. Junto a ese fondo intenso, el sofá Raglán Home, con su sobriedad refinada, equilibra la escena. Los cojines en azul eléctrico irradian una chispa de vitalidad, un guiño inesperado que despierta la mirada.

Las butacas Wassily, con su icónica estructura y piel blanca restaurada, aportan un carácter único, una historia que convive con el presente. No son solo asientos; son piezas que dialogan con el tiempo, que aportan una dimensión cultural y emocional. La librería Ptolomeo, la mesa de centro Cambio y las mesas auxiliares Iris, todas cuidadosamente seleccionadas, trabajan en conjunto para que la escena se sienta natural, sin artificios, y al mismo tiempo sofisticada.

La iluminación es una pieza clave que enciende y apaga atmósferas. La lámpara AJ de Arne Jacobsen y la Panthella 250 en coral de Verner Panton no son simples focos: son esculturas que transforman la energía del espacio, crean zonas de intimidad y dinamismo. La alfombra Tomol añade una textura sutil, como un susurro bajo los pies, y la figura Embraced de Jaime Hayon para Lladró aporta un punto emocional, una pausa contemplativa que conecta con el alma del hogar.

Moverse al comedor es descubrir otro ritmo, otro lenguaje. La mesa Cambio con tapa cerámica Helena se convierte en un altar para la convivencia, un punto de encuentro que invita a la celebración diaria. Las sillas Oru de Patricia Urquiola en madera tintada y textil negro aportan ligereza y continuidad cromática, mientras las alfombras Musta en negro y amarillo suman una energía sutil, una sofisticación con carácter.

La consola Danil, con su estructura metálica y base en azulejo, es una pieza que aporta fuerza y refuerza el carácter gráfico del comedor. Aquí, el arte cobra protagonismo con la obra mixta sobre arpillera de Manolo Puig, que trae al proyecto la conexión emocional con Altea, con su historia, su tierra. Sobre la mesa, los objetos decorativos como los Parrot Party y la lámpara PH5 de Poul Henningsen dan un toque de humor y sensibilidad, porque la casa es también un juego, una experiencia.

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La cocina es un espacio que celebra el mar y sus paisajes. Las rayas y el verde esmeralda llenan la estancia de energía y movimiento, como un baile visual que conecta con las playas cercanas. El mobiliario de Berloni Italia se convierte en el contenedor perfecto para esta historia: limpio, funcional y sin artificios. Los taburetes negros de la colección Oru, repitiendo un elemento del comedor, refuerzan la coherencia y la sensación de hogar vivido. La escultura del pez Betta de Lladró, como un guiño onírico, introduce una dimensión poética que va más allá de lo funcional.

En la salita, el rincón más íntimo, propongo una banqueta diseñada por mí, tapizada con una tela de Ka Internacional que aporta textura y calidez. La fotografía de Elton Rocha acompaña este espacio, aportando una mirada poética, casi narrativa. La estantería Kaif y la mesa auxiliar Iris, de estética industrial ligera, aportan equilibrio, mientras la lámpara Tab F diseñada para Flos introduce un punto de sofisticación técnica y contemporánea.

El dormitorio de invitados es un canto a la luz del Mediterráneo. Cada rayo de sol que entra parece acariciar el cabezal tapizado en amarillo vibrante con la tela Tribu de Ka Internacional. Es un gesto de color que ilumina sin saturar, que da vida y calma a la vez. Las lámparas Ok de Konstantin Grcic, con sus líneas limpias, aportan ese contrapunto escultórico que equilibra la composición.

En el dormitorio principal, el terciopelo mostaza del cabezal transforma la habitación en un refugio cálido y acogedor. Los cojines de la colección Artís y las mesitas lacadas en blanco, diseñadas por mí, aportan la delicadeza de los detalles que hacen que el espacio sea único. Las lámparas Chiara Table de Mario Bellini iluminan con suavidad, creando una atmósfera que invita al descanso y la desconexión.

Por último, el baño, diseñado íntegramente con elementos de Grupo Porcelanosa, es la culminación de esta vivienda. Aquí se respira la misma coherencia, la misma búsqueda de confort y belleza sin estridencias que marca todo el proyecto. Cada pieza está pensada para que el usuario sienta que está en un espacio donde el diseño dialoga con la experiencia y donde cada detalle es un gesto de cuidado.

En conjunto, esta vivienda en Altea no es solo un lugar para vivir. Es una narrativa de luz, color y emoción que invita a habitar el presente con intensidad, con calma, con ese equilibrio que hace que cada día sea una experiencia nueva. Es un cóctel que mezcla la frescura del mar con la calidez del hogar, un espacio para soñar despierto y para celebrar la vida en cada instante.

Agradecimientos: The Masie, Lladró, KA Internacional, Manolo Puig y Serra Concept.